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La intensa jornada de clasificación vivida el sábado está dejando muchas consecuencias y opiniones. Las lagunas en el reglamento y la aplicación del mismo ha sido una fuente inagotable de críticas, especialmente desde Ferrari y Red Bull. Los dos equipos, mediante sus directores de equipo, han dejado claro su descontento con la FIA y dirección de carrera. 

Sebastian Vettel ha sido crítico con la forma de aplicar las sanciones y el reglamento en las carreras. Este pasado fin de semana la polémica salpicó el Gran Premio de Hungría, no sólo en clasificación, también en carrera. La lucha entre Max Verstappen y Kimi Räikkönen levantó opiniones varias, y Vettel señala a dirección de carrera.

La FIA y los equipos han llegado a un acuerdo para estandarizar los sensores de presión y de temperatura del motor en un intento de rebajar los costes, ayudando a los equipos menos capaces económicamente.

Nico Rosberg asegura que las restricciones de la radio en la Fórmula 1 están "bien", y hace de las carreras, una contienda "más difícil". Así lo ve el líder del mundial, una semana después de haber sido descendido del segundo al tercer puesto en Silverstone, por haber recibido mensajes no autorizados de su equipo durante la carrera.

Sebastian Vettel no se ha mordido la lengua y ha criticado con dureza las novedades que la FIA ha introducido para este fin de semana: la restricción en las comunicaciones por radio y la implementación de sensores electrónicos para controlar que los pilotos no rebasen los límites de la pista con las cuatro ruedas. 

Carlos Sainz ha valorado las últimas modificaciones en el reglamento de la FIA que se implementarán a partir del Gran Premio de Hungría. Las novedades son un aumento de la restricción de las comunicaciones por radio y la introducción de sensores electrónicos en la pista para controlar que los pilotos no rebasen los límites de ésta, pues no habrá más pianos disuasorios. 

La FIA ha confirmado la instalación de sensores eléctricos para controlar que los pilotos cumplan con el reglamento de los límites de la pista en el Gran Premio de Hungría. Tras las quejas de los pilotos sobre los pianos disuasorios del GP de Austria, que incluso llegó a provocar más de un accidente y algunos fallos en la suspensión, la Federación ha optado por esta nueva medida. 

La polémica sobre la normativa de la comunicación por radio entre equipos y pilotos llegó a uno de sus puntos más álgidos en el pasado GP de Gran Bretaña. Nico Rosberg, que rodaba en segunda posición, vio cómo su coche se quedaba estancado en séptima marcha. Mercedes pidió permiso a la FIA y, aunque fuera a ser sancionado, calcularon que era mejor quebrar la normativa y recibir una penalización que tener que aceptar la retirada de uno de sus pilotos.

La investigación a Nico Rosberg y a Mercedes por dar información de más en el pasado Gran Premio de Gran Bretaña ha devuelto a la superficie el debate sobre las comunicaciones por radio. Desde 2015 se aplica la prohibición de aconsejar a los pilotos cómo ir más rápido por el trazado, y ahora hay una oleada de opiniones en contra de la normativa. 

Christian Horner ha arremetido duramente contra la normativa de radio; y no sólo él, Toto Wolff y Pat Symonds tampoco encuentran sentido en restringir tanto las comunicaciones desde el muro de boxes. Mercedes tuvo que quebrar esta regla para que Rosberg no abandonara cuando el alemán reportó un problema terminal en la caja de cambios y fueron sancionados con 10 segundos, entregando la segunda plaza a Verstappen. 

James Allison confía en la normativa de 2017 para ver coches más bonitos en pista. En la Conferencia del Deporte de la FIA celebrada en Turín, el director técnico de Ferrari resalta el objetivo de los equipos y de la reglamentación. 

Lewis Hamilton ha cargado duramente contra las restricciones en la radio impuestas por la FIA tras el problema en el mapa motor que sufrió en el Gran Premio de Europa. Frente a la prohibición de recibir indicaciones específicas para solucionar su pérdida de dos décimas por vuelta, el británico optó por cambiar varios ajustes del volante hasta que el monoplaza recuperó su rendimiento habitual, una práctica que le costó varios segundos útiles para intentar acercarse a la batalla por el podio.

Sebastian Vettel ha opinado sobre la nueva polémica con la prohibición del exceso de información en las comunicaciones por radio. Tras lo ocurrido en Bakú, la normativa ideada en 2015 vuelve a verse entre la espada y la pared. 

Toto Wolff cree que la regulación que limita las comunicaciones por radio entre los pilotos y los equipos debería ser revisada tras lo acontecido en el Gran Premio de Europa. A diferencia de Nico Rosberg, Lewis Hamilton no vivió una carrera fácil en Bakú. El vigente campeón del mundo se vio atrapado en la quinta posición durante doce vueltas por un problema en la configuración de su Mercedes.

Mercedes era y es uno de los equipos que no está muy de acuerdo con el cambio normativo. Toto Wolff ha vuelto a confirmar la postura de la marca alemana, y destaca la situación actual de la F1 al respecto de la competitividad.