Entrevista a Monisha Kaltenborn: "Hablamos con Bianchi para 2015, pero no teníamos nada decidido"
Entre el monopolio masculino que había existido históricamente en las principales instituciones del automovilismo, el nombre de Monisha Kaltenborn (Dehradun, India, 1971) pasará a la historia por estrenar la representación de las mujeres en un cargo de máxima responsabilidad dentro de un equipo de la Fórmula 1. En su día, hablar sobre la primera fémina que tomaba las riendas de una escudería supuso un motivo de absoluta distinción hacia la figura de esta valiente abogada hindú, si bien el transcurso de los años ha inclinado la balanza en favor de aquellos que exigen su dimisión del cargo por los malos resultados y la excesiva dependencia de exóticos patrocinios. Durante su corta andadura en un cargo importante, Monisha ha pasado de alcanzar la gloria con tres podios en una misma temporada a sentarse frente a un tribunal australiano con el miedo de ser encarcelada. Así transcurre la existencia de una mujer "con dos hijos y un marido" que afronta cada fin de semana la difícil responsabilidad de que toda una entidad histórica como Sauber no sea consumida por las deudas y se mantenga a flote en la exigente atmósfera de la Fórmula 1.