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Maurizio Arrivabene ha dejado caer que Sebastian Vettel no tiene su futuro asegurado en Ferrari más allá de 2017, año en que expira su contrato actual. El alemán, que la temporada batió de forma clara a su compañero de equipo Kimi Räikkönen por 128 puntos de diferencia, este curso le supera por apenas siete y aún no ha probado las mieles de la victoria como sí hiciese por partida triple en su primer año con la Scuderia.

Ferrari ha tenido un viernes mejor de lo esperado en comparación con anteriores Grandes Premios. Kimi Räikkönen ha terminado a sólo tres décimas del mejor tiempo de Rosberg, pero cabe destacar que Mercedes no forzó hoy tras la debacle de Malasia con Hamilton. El ritmo en tandas largas no es tan competitivo pero en Maranello ven posible mejorar el equilibrio del coche durante esta noche. 

Ferrari consuma otra actuación decepcionante y se marcha de Malasia recordando su flagrante victoria del 2015 como referencia de la integridad ganadora con la que acostumbraba a forjar sus brillantes estrategias de carrera hasta poner en aprietos al dominio de Mercedes AMG, una actitud ya difusa en todos sus movimientos más recientes. La Scuderia, sucumida por la inmediata urgencia de ganar, ha visto hoy cómo la impulsividad de Sebastian Vettel le llevaba a impactar contra el coche de Nico Rosberg en la primera curva antes de abandonar la carrera y recibir el juicio crítico de toda la opinión pública del paddock. La falta de ritmo de Kimi Räikkönen, sustancialmente más lento que Red Bull en todas las tandas de carrera, ha sentenciado la pobre imagen del equipo en Sepang, donde se afianza su distinción oficial de tercera fuerza competitiva de la parrilla.

Ferrari no tuvo un fin de semana del todo acertado en el Marina Bay de Singapur y eso les deja a pie cambiado respecto a Red Bull. Un problema en la suspensión trasera de Sebastian Vettel y una decisión extraña con Kimi Räikkönen en carrera dejó a los de Maranello sin podio. Pese a eso, Maurizio Arrivabene no se rinde. 

Pese a los problemas de Ferrari en el Gran Premio de Singapur, Sebastian Vettel cree que las mejoras que su equipo tiene previstas para las seis carreras restantes les ayudarán a mejorar respecto a su posición actual en el Campeonato de Constructores. 

Kimi Räikkönen fue para muchos uno de los hombres destacados de la carrera. La pelea con Lewis Hamilton fue uno de los momentos estelares, y una decisión desde el muro generó dudas sobre si realmente el finés pudo terminar en el podio. Pese a esa tercera parada, la pelea con Hamilton por el tercer lugar del podio siguió abierta, aunque no pudiese adelantar al británico. El esfuerzo de Kimi no ha quedado en el olvido, y en Italia alaban la conducción del campeón de 2007. 

En medio de la polémica por la decisión de realizar un pit-stop adicional con Kimi Räikkönen a final de carrera, Maurizio Arrivabene ha salido en defensa de los ingenieros de Ferrari y el criterio adoptado para maximizar sus posibilidades de terminar en el último cajón del podio. El piloto finlandés disfrutaba de una ventaja relativamente cómoda sobre Lewis Hamilton mientras rodaba en tercera posición, aunque la Scuderia ha optado por imitar la estrategia de Mercedes y le ha llamado a boxes para montar un juego de neumáticos ultrablandos. Las expectativas pasaban por cubrirse ante un posible coche de seguridad y mantener la ventaja sobre Hamilton, pero el criterio de la Scuderia ha resultado infructuoso en todos los sentidos después de que Räikkönen saliera de boxes en cuarta posición y no pudiera recuperar el podio en las últimas 18 vueltas.

En el escenario donde consiguieron su tercera victoria el año pasado, Ferrari se ha acercado al podio pero sin ocasión de pisarlo. Kimi Räikkönen ha perdido la tercera plaza tras una controvertida estrategia de tres paradas de su equipo, mientras que Sebastian Vettel, penalizado por su posición de salida, ha conseguido remontar de forma espectacular desde la última hasta la quinta plaza.

Ferrari está a punto de cumplir un año sin victorias. La temporada pasada pareció el resurgir de la Scuderia pero este año parece que han dado un paso atrás, pues están a la misma distancia o más lejos de Mercedes, y han cedido la segunda posición de la clasificación a Red Bull. Sin embargo, una de las victorias de 2015 fue en Singapur, y en Maranello esperan que sean capaces de repetir el triunfo. 

La carrera en el Gran Premio de Italia, carrera de casa para Ferrari, fue un duro golpe para los de Maranello. A pesar de consolidarse como segundo equipo, los italianos vieron como la superioridad de Mercedes es imparable.

Ferrari ha decidido realizar cambios dentro del equipo y ha reorganizado su departamento de aerodinámica. Ahora cuentan con el especialista de GT, Enrico Cardile. Sergio Marchionne, presidente de la Scuderia, realizó a mitad de temporada un análisis de las fortalezas y debilidades del equipo. La decisión que tomaron fue optar por el talento que tenían dentro de la organización.

El equipo Ferrari no ha podido aprovechar una ocasión de oro para sumar puntos y subir al podio. Sebastian Vettel y Kimi Räikkönen sufrían un toque en La Source en el que también estuvo implicado Max Verstappen. El holandés centra las impresiones del equipo, con opiniones negativas sobre el comportamiento en pista durante toda la carrera. Finalmente han conseguido salvar algunos puntos y el equipo, aunque con algo de amargura, ya prepara el Gran Premio de Italia de la próxima semana.

El presidente de Ferrari, Sergio Marchionne, admite sentirse decepcionado por ver que el objetivo de 2016 se está escapando. Pese a los constantes reportes en la prensa hablando de crisis en Ferrari, el italiano sigue convencido del talento y el buen hacer de la Scuderia.