Leclerc, tan cerca y tan lejos de Verstappen

Siempre me han hecho gracia los que instan a los rivales a que reaccionen en la siguiente carrera. Como los políticos que advierten al adversario de que lo que proponen las acabará pasando factura. Considero que es algo estúpido. Porque en realidad, en el fondo, estas advertencias quieren decir que esperan lo contrario, que el adversario no reaccione y así cobrar ventaja, ya sea en las pistas o cara a las urnas.

Pero en este caso, en el fondo, Horner expone una realidad, de la que ya hablamos hace poco más de una semana cuando dijimos que Leclerc y Ferrari se la juegan en los próximos cuatro grandes premios.

Charles lo sabe, lo reconoce. La ventaja de Max Verstappen sobre el monegasco son 49 puntos, “dos grandes premios”, como dice el piloto de Ferrari… suponiendo, que es mucho suponer, que Max no acabe esos dos Grandes Premios.

Pero la cosa se torna más complicada si Max se obstina ya no en ganar, sino en ser simplemente segundo detrás de Leclerc. En este supuesto necesitaría siete grandes premios para igualarle, es decir, hasta Italia por lo menos.

Hay que tener en cuenta un detalle nada despreciable. Se han disputado nueve grandes premios. El balance hasta la fecha es de siete a dos favorable a Red Bull, de seis a dos si comparamos a Max y Charles; la otra victoria ha sido de Pérez.

Los números son peores para Sainz. Está a tres grandes premios de Max. A 11 de superarle, suponiendo que Carlos gane y Max sea segundo. Y no debemos olvidar que Sergio Pérez también juega en la ecuación. 

Max tiene ventaja sobre todos ellos… pero Charles está en una posición delicada. Un abandono podría colocar a Carlos Sainz a su altura y a Sergio Pérez claramente por delante.

Silverstone no es por sí mismo la clave del Campeonato, pero puede decantar la situación, efectuar una primera selección. Los próximos cuatro grandes premios sí que serán claves de cara a tener una segunda parte de Campeonato más o menos emocionante, casi decidida o muy incierta. Leclerc puede que esté cerca de Max, pero a la vez está muy lejos.