Alonso ni está, ¿ni se le espera?

Unos lo ven como el recambio claro en Red Bull debido al pobre rendimiento de Pierre Gasly. Otros desearían verlo subido en el coche de Vettel para intentar solucionar la situación de Ferrari. Hay a quien le gustaría verle en Mercedes al lado de Hamilton para tener un auténtico combate entre los 'jefes'.

Pese a que todos los directores de equipo alaban las dotes de piloto de Fernando Alonso, pese a que los pilotos declaran que les gustaría verlo de vuelta en las parrillas, pese a los deseos de los aficionados... el ansiado retorno difícilmente se producirá. Las puertas están cerradas. Y bien pudiera decirse que ‘ni está, ni se le espera’.

Los comentarios parecen ir más en el sentido de que sería bueno que Alonso volviera a la Fórmula 1 "pero no en mi equipo" o "no como mi compañero". Si se lee atentamente, por ejemplo, la transcripción de la rueda de prensa con Hamilton, Vettel y Verstapen, las frases sueltas parecen apostar por el retorno… pero el contenido completo hace que la convesación adquiera un todo distinto, de jocosa incredulidad.

Quizás por eso, la pregunta que se hacen todos los aficionados: "¿Por qué Alonso no está en la Fórmula 1?", no sea exactamente la correcta. Quizás debiéramos cambiarla por otra, similar tal vez, pero que puede dar respuestas distintas: "¿Por qué los equipos no quieren a Fernando?". Incluso la razón por la que sólo logró dos títulos cuando, como dijo Verstappen, debería tener muchos más.

Hace un par de años ya, a finales de agosto de 2017, en este mismo blog dijimos que "Alonso no tiene quien le quiera". Nos referíamos, obviamente, a los grandes equipos porque los pequeños, sin posibilidades de luchar por la victoria, no le interesan. El asturiano ya ha probado lo que es eso de correr en el infierno y no lo quiere de nuevo. Ya pasó por el equipo Renault en descomposición en 2008 y 2009, y el infierno en McLaren entre 2015 y 2018.

Puestas así las cosas, el retorno de Fernando no pasa por sus ganas de hacerlo sino porque las circunstancias hagan que alguno de los equipos grandes lo necesite. En el Gran Circo no puedes decir ‘nunca jamás’. Las puertas pueden abrirse o cerrarse de forma sorprendente por motivos externos. Ya lo vimos en 2015 cuando Alonso y Ron Dennis decidieron unirse pese a su tormentosa relación de 2007 en McLaren: uno necesitaba un equipo con ciertas garantías tras su salida de Ferrari y McLaren precisaba un líder campeón y con fama de excelente probador para encabezar su proyecto con Honda.

Pero tal y como están las cosas no veo por ahora una alineación de los astros que marque esa circunstancia favorable. Hoy los equipos grandes rehúyen la batalla interna, un posible ambiente tóxico; confían en un solo líder para el Mundial de pilotos y buscan un acompañante lo suficientemente rápido para asegurar buenos puntos de cara al Campeonato de constructores.

Mercedes apuesta por Lewis y relega a Bottas el papel de acompañante; es más, ya se ha dicho que su segundo en 2020 se decidirá entre Bottas y Ocon. Está claro que no quiere vivir otro año como el del gran enfrentamiento entre Hamilton y Rosberg.

Ferrari aún tiene a Vettel y su recambio ya está decidido, Leclerc… pero no antes de 2021, porque para el próximo año ambos tienen contrato.

Y en Red Bull sucede lo mismo con Verstappen, aunque en este caso están a la busca de un buen segundo… que no puede ser Fernando, obviamente, no ya porque Alonso no aceptaría sino porque Honda ha hecho una cruz sobre el nombre del asturiano.

Los hechos hablan. Este año McLaren debió montar a toda prisa una alternativa para que Fernando corriera en Indianápolis porque Honda no se prestó a darles motores. Y para 2020, Honda ha frustrado una alianza entre Andretti, McLaren y presumiblemente Fernando para IndyCar. Los lacerantes comentarios que el asturiano tuvo por radio hacia el motor japonés en 2016 y 2017 no son digeribles por los nipones, por más que pudieran ser merecidos.

Incluso McLaren, que sería un destino en estos momentos tolerable –si bien todavía les falta mucho para estar en la ‘primera división’– cerró amablemente la puerta a los rumores. "Nuestro futuro son Carlos y Lando", dijo Zak Brown, quien ha confirmado a los dos pilotos para 2020.

Y sobre todo están las declaraciones del propio Fernando tras su segunda victoria en Le Mans: "Por ahora, volver a la F1 no entra en mis planes inmediatos". Y cada año que pase, la probabilidad de un retorno será lógicamente más remota.

Unos planes inmediatos que pueden sorprendernos. Y cuyo anuncio no se puede demorar mucho si de verdad quiere correr 8 carreras antes de que acabe el año. Bueno, no hay muchas más carreras icónicas en el campeonato, pero esa es otra historia. Mientras, en el paddock de la F1 no se le espera… salvo que venga de visita u ocurra un auténtico terremoto.