Kilian Meyer: una promesa a la que la diabetes no puede parar

Lo importante, tanto o más que la victoria desde la Pole en la tercera carrera, lo hizo en la segunda. Kilian salía 13º y efectuó una recuperación espectacular, que habla mucho de su garra y sus ganas.

El barcelonés, de origen suizo, corre bajo los auspicios de Fórmula Campeones, la pirámide valenciana que está detrás de algunos de los pilotos más prometedores del país, en karting y ahora en F4, con el apoyo y gestión técnica de Escudería Praga. Comenzó con ellos ya en el karting, especialidad en la que empezó a competir con sólo seis años.

"¡Vaya fin de semana! Dos podios y un triunfo importante para mi objetivo: lograr el título del Campeonato de España de Fórmula 4. En estos momentos soy líder del Campeonato y siento una alegría muy grande porque se ve reflejado el trabajo individual como piloto y el del equipo", dijo un alegre Kilian al terminar la prueba.

Obviamente Meyer considera el ganar la F4 Spain como la catapulta a objetivos más ambiciosos, unos que no parecían nada fáciles cuando hace tres años le diagnosticaron una diabetes tipo 1.

"Hace tres años, cuando me diagnosticaron Diabetes Tipo 1, fue un momento muy duro. Pensé que podría afectar a mi carrera deportiva, pero descubrí que esto no podía ser un impedimento para mi sueño: diabetes y deporte de élite no son incompatibles. Precisamente el tener unas rutinas de trabajo muy exigentes en el día a día es algo que me permite llevar un control más exhaustivo sobre mi cuerpo", señala Meyer.

Posiblemente uno de sus héroes pueda ser Charlie Kimball, el piloto de Indycar diabético como él, lo que no le impide ser un fijo del Campeonato desde hace varias temporadas. Como Kimball, tiene apoyos de diversas empresas farmacéuticas relacionadas con la enfermedad –GluQUO y GlucoUp– así como asociaciones –Canal Diabetes, Fundación para la Diabetes–.

"Competir con diabetes no me ha hecho cambiar el ritmo de entrenamientos y preparación física, pero para poder dar el 100% debó tener un control más riguroso sobre mi salud que mis contrincantes y una alimentación adecuada que evite los cambios de nivel de azúcar en la sangre", señaló en su web el piloto de 16 años.

Por ello, la competición es sólo uno de los objetivos de la vida de Kilian. Otro es concienciar a los diabéticos sobre que pueden prácticar deporte al más alto nivel y para ello colabora con asociaciones e instituciones, aunque reconoce que hay que ser un poco más disciplinado.

Y además, Meyer tiene muy claro que quiere "seguir por un buen camino deportivo" y que su objetivo inmediato es "defender el liderato hasta el final". Pero todo ello sin olvidar los estudios, que combina con entrenamientos y preparación de las próximas citas.

"Vale la pena soñar y luchar por lo que te propones. Los límites son los que se pone uno".

Kilian tiene 97 puntos, siete de ventaja sobre Franco Colapinto, que parecía destinado a controlar el Campeonato tras la primera carrera y 12 sobre Shihab Al Habsi, otro gran protagonista en Motorland. Las próximas carreras prometen ser disputadas y emocionantes.