Ford presenta la Alerta de Dirección Contraria
Ford ha incorporado a sus nuevos Focus el sistema de Alerta de Dirección Contraria para prevenir accidentes por la falta de atención de conductores que se meten en dirección prohibida.
La seguridad en los automóviles modernos es algo que ha evolucionado muchísimo. Con cada generación nueva que los fabricantes ponen en circulación, se da un salto hacia delante en cuestiones de seguridad, asistencias a la conducción y respuesta en momentos críticos al volante. Uno de los mejores ejemplos es el nuevo Ford Focus, un coche que ha evolucionado exponencialmente respecto a la anterior generación y destaca por su equipamiento en asistentes y sistemas de seguridad.
Hace poco conocimos que la nueva entrega del Focus ha sido capaz de lograr las cinco estrellas Euro NCAP. También conocimos el sistema antibaches, que detecta las irregularidades del terreno y adapta las suspensiones para limitar el 'efecto bache'. Ahora, Ford incorpora otra tecnología que incluye en el nuevo Focus inédito en el segmento: la Alerta de Dirección Contraria.
El sistema se basa en el reconocimiento de señales de tráfico que ya equipa el modelo, emplea información GPS y una cámara frontal. En las situaciones en las que el conductor se cruza con dos señales de dirección prohibida a ambos lados de la vía a una autopista o autovía, emite una advertencia y muestra al conductor un símbolo rojo de dirección prohibida así como un mensaje de comprobar dirección.
Jan Guesten, ingeniero de desarrollo de tecnologías de asistencia al conductor de Ford Europa, ha afirmado que los accidentes frontales pueden ser "devastadores" y ha señalado que los conductores que están cansados, confundidos por las señales de tráfico o que conducen bajo malas condiciones meteorológicas, pueden tomar el camino equivocado.
Según datos de la CEA, durante la última década se han producido una media de 130 accidentes anuales ocasionados por coches en dirección contraria. De estos 130 accidentes anuales, fallecieron entre 25 y 30 personas cada año. Este tipo de accidentes suelen tener lesiones muy graves al combinarse la velocidad de ambos coches en el impacto.
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