El Fiat 500 cumple 60 años y se une a la colección del MoMA

Todo empezó en los años 40 con una idea nacida en la mente del dictador Benito Mussolini, quien convocó de urgencia al senador Giovanni Agnelli para transmitirle su deseo vehemente de motorizar al pueblo italiano con un vehículo económico que no superase, bajo ningún concepto, el medio millón de liras, de forma que la gran mayoría de la población pudiese adquirir uno. Tal fue su impacto en el desarrollo de Italia que, apenas unos años más tarde, Adolf Hitler le copió su estrategia con el célebre Volkswagen Tipo 1.

Con el propósito de honrar su leyenda, su diseño y su filosofía de transporte que lo hicieron famoso en todo el mundo, el Museo de Arte Moderno de Nueva York, más conocido como el MoMA, ha decidido incluir al Fiat 500 en su colección permanente junto a algún otro vehículo de la época, como la primea unidad del Jaguar E-Type que llegó a los Estados Unidos de América.

“Si bien el Fiat 500 ha dejado indudablemente su marca en la historia del automóvil, es igualmente cierto que nunca ha sido solo un coche”, ha mencionado Olivier François, Director General de la marca y Director de Marketing del grupo FCA. “En sus 60 años de historia, el 500 ha trascendido su manifestación material para entrar en el imaginario colectivo y convertirse en un icono, que ahora tiene el honor de haber sido certificado como tal al haber sido adquirido por el MoMA como homenaje a su valor artístico y cultural”.

El Topolino, como también se le conoce en algunos países, es un vehículo que alteró profundamente la producción de automóviles en Europa, tal y como ha señalado Martino Stierli, director del The Philip Johnson Chief Curator of Architecture and Design del MoMA. “Es una obra maestra sin pretensiones ni precedentes que, en nuestra colección, nos permitirá ampliar la historia del diseño del automóvil tal como la cuenta el museo”, ha añadido.

El modelo adquirido por el Museum of Modern Art of New York es un 500 serie F, el más popular de todos los 500 fabricados entre 1965 y 1972 –cabe recordar que la generación original de este modelo cesó en 1975–. Este pequeño gran coche que tan pronto como salió a la venta obtuvo un gran éxito a lo largo y ancho del planeta, contaba con un motor de medio litro –500 centímetros cúbicos– capaz de rendir 18 caballos de potencia y alcanzar una velocidad punta de 95 kilómetros por hora, todo un prodigio para la época, dado el tamaño del coche y el de su propulsor trasero.

En lo que fue para Fiat un claro ejercicio de posicionamiento en la mente del consumidor medio de automóviles, la casa italiana llegó a fabricar más de 4 millones de unidades en menos de 20 años si tenemos en cuenta todas sus versiones: 500, 500 Sport, 500 D, 500 F, 500 L y 500 R, entre otras con menor volumen de mercado. Se trata, en definitiva, del “bambino” que ha logrado la hazaña de mantener su identidad, permaneciendo siempre joven durante más de seis décadas y cientos de estilos de vida, modas y sociedades. Más que un referente, un verdadero fenómeno social.

El Fiat 500 de nueva generación, que renació para la sorpresa de muchos en el año 2007 y conmemoró así su medio siglo de historia, hoy también cumple 10 años siguiendo la estela del éxito de su predecesor. Para celebrarlo, Fiat España acaba de lanzar una campaña de Twitter con la que podemos ganar un nuevo 500 si participamos en su piñata de tweets con el hashtag #Felicidades500 y nombramos su cuenta @fiat_es. ¡Brindemos por otros 60 años más!

¡El #Fiat500 cumple 60 años! Lanza un tuit a su piñata con #Felicidades500 + @fiat_es y podrás ganar un Fiat 500 pic.twitter.com/Thy5TAxLpm

— Fiat España (@Fiat_es) 3 de julio de 2017