Citroën AX y ZX: 20 años sin dos 'grandes' que lo cambiaron todo

Citroën AX tres y cinco puertas, ¡genial!. Así finalizaba un anuncio publicado en 1988 en el que el utilitario francés cruzaba la Muralla China y saltaba de un vagón de tren a otro. Y efectivamente el Citroën AX fué genial para la marca, pues se fabricaron más de 2.400.000 unidades entre 1986 y 1998 y tras 20 años desde que abandonó la línea de montaje, todavía es recordado.

Pero el pequeño AX, antecesor de coches como el Citroën Saxo o el C3, no está solo en esta celebración. Hay otro modelo al que la firma francesa le debe mucho y que también cumple 20 fuera de producción: el Citroën ZX. El primer compacto auténtico dentro del catálogo de Citroën tras muchos años, que ocupó el lugar que había entre el pequeño AX y el más elaborado e igual de conocido Citroën BX.

Cada modelo nació con un objetivo muy concreto, aunque compartían algunas soluciones como una carrocería diseñada con la eficiencia aerodinámica en mente, habitáculos optimizados, bajos costes de mantenimiento; el primer paso que ha llevado a la marca hasta lo que ofrece actualmente. Fueron dos coches muy innovadores, al más puro estilo Citroën, capaces de conquistar a una generación de conductores y de quedar en el recuerdo de cuantos viajamos en sus plazas traseras.

El Citroën AX nació como respuesta a la crisis del petróleo de 1979. Se necesitaron varios años de investigación, pero finalmente se presentó en el Salón de París de 1986. Lucía una estética rompedora para la época, una aerodinámica de 0,31 y las versiones más equipadas no superaban los 700 kilos de peso. El objetivo era reemplazar al mítico Citroën 2CV, así que también se optimizó al máximo el habitáculo hasta lograr aprovechar al máximo el espacio disponible y ofrecer un maletero que llegaba a los 273 litros. Todo era nuevo en este coche, todo.

Una de las versiones más recordadas del Citroën AX es el GTi, con un motor de 100 caballos que hacía del coche un modelo muy ágil y ratonero. Sin embargo, no tuvo un gran volumen de ventas en España, pues competía con el deseado Peugeot 205 Rallye en equipamiento, potencia y precio. No obstante, aún hoy es un coche muy valorado entre los aficionados.

El Citroën AX se fabricó en España, en Vigo, de donde salieron un total de 812.951 unidades. Fue elegido coche del año en España en 1988, mercado donde tuvo un éxito arrollador desde el primer momento.

Respecto a su 'hermano mayor', el Citroën ZX, su ambición era algo mayor, y buscaba convertir a Citroën en una marca totalmente generalista con un producto algo menos exclusivo que modelos como el Citroën BX. Además, lo hacía con innovaciones como el eje trasero con efecto autodireccional programado, la banqueta trasera abatible –fue pionero en esta solución– o una estrategia comercial revolucionaria que también fue empleada con la primera generación del Citroën C4: su primera aparición pública fue en competición.

El Citroën ZX se presentó en versión Rally-Raid que comenzó su andadura en pruebas como la Baja Aragón antes de darse a conocer como versión de producción. No fue hasta el Salón del Automóvil de Ginebra de 1991, cuando la marca dio el paso y presentó el modelo 'para calle'. En ese momento ya habían pasado dos meses de la aplastante victoria de Ari Vatanen en el París-Dakar de 1991. Victoria que se vio completada con otros primeros puestos en 1994, 95 y 96, pero con Pierre Lartigue al volante.

Las versiones más recordadas por los aficionados a día de hoy son los ZX Volcane y obviamente, el ZX 16 válvulas, cuyo motor de 155 caballos pasó a 167 caballos con el restyling que sufrió el modelo y dejó una huella que todavía hoy perdura. Sólo sirva de ejemplo las unidades que todavía compiten en rallies regionales. Tuvo incluso versiones turbodiesel con 93 caballos y la plataforma del ZX sirvió para dar vida al Peugeot 306, lanzado al mercado en 1993.

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