28 nuevos Aston Martin DB5 como los de James Bond

Sin duda, una de las imágenes más reconocibles de la historia del cine y de la cultura popular es un Aston Martin DB5 asociado al personaje de 007, o James Bond, el agente secreto con licencia para matar al que siempre le ponen a disposición modelos llenos de artilugios de defensa, espionaje o cualquier otro que pueda ser útil en sus misiones, con una imaginación envidiable gracias a Q, el responsable de investigación y desarrollo de la agencia británica.

Y como Aston Martin sabe que muchos entusiastas tanto de la saga literaria y cinematográfica, como de los coches, desean sentirse por un momento como Bond, ha decidido fabricar 28 réplicas del DB5 con toda una serie de dispositivos ‘secretos’ que harán las delicias de los propietarios, aunque no contarán con misiles ni armas, pero sí que prometen cosas divertidas que harán sonreír a quienes se hagan con uno de estos modelos, como las placas de matrícula giratorias. 25 de esos modelos serán para la venta, otro para Aston Martin, otro para EON y el último para ser subastado con fines benéficos.

Los modelos estarán listos en el año 2020, con la fabricación de los DB5 donde se produjeron originalmente, en la fábrica de Newport Pagnell, que hoy se dedica a la restauración y otros servicios para modelos clásicos de la marca. Las especificaciones estarán lo más cerca posible del modelo de 1964, pero ¿por qué? Porque fue ese año en el que por primera vez, en la película ‘Godlfinger’, el DB5 apareció con Bond a los mandos, en ese momento encarnado por el actor Sean Connery.

El DB5 original era un modelo diseñado por Touring, que reunía lo mejor de las líneas italianas con la elegancia clásica británica, y que fue lanzado al mercado en 1963. Su producción, que llegó a las 1.059 unidades, cesó en 1965 para dar paso al DB6. Contaban con un motor de 4 litros de 6 cilindros en línea que ofrecía 282 caballos de potencia. Automáticamente se convirtió en un referente de belleza en la historia del automóvil.

Que Aston Martin vaya a fabricar "reproducciones auténticas del DB5 que se ve en la pantalla, con algunas modificaciones simpáticas, para garantizar los más altos niveles de calidad y fiabilidad de construcción" es una noticia excelente, aunque sólo sea en términos estéticos, ya que el modelo no será apto para rodar por las vías públicas. Su precio se cree que rondará los 3 millones de euros, que es un precio elevado por un modelo que, aunque vendrá completo, no podrá usarse en la carretera. Quizás sería posible una transformación, pero el coste de la misma quizás hiciera más rentable comprar un modelo ya existente. En todo caso, poder apoyarse en una de las aletas y decir aquello de ‘mi nombre es Bond, James Bond’ quizás valga el dinero de estas réplicas.