El primer fin de semana de abril el circuito madrileño vestía sus mejores galas para recibir a un elenco de competiciones clásicas de gran nivel en el que, por segunda vez en su historia llenaban un Jarama abarrotada gracias a la fórmula “Jarama Classic”, que pese a su juventud se ha convertido en la cita referencia en cuanto a calidad y cantidad de todo el panorama nacional.