Marco Apicella tiene un récord del que seguramente no puede sentirse orgulloso, claro que quizás muchos otros firmarían su caso, porque ni siquiera tuvieron la oportunidad de alinearse en un GP. Su carrera en la F1 duró menos de 200 metros, los que separaban la línea de salida de la frenada de la primera chicane de Monza.
No sé si es casualidad o no, pero ayer hubo un monoplaza con el número 55 rodando. No, no es Carlos Sainz con su McLaren, sino Àlex Palou. El catalán ha seleccionado el 55 para la Indycar, el campeonato que afrontará este año –500 Millas incluidas– en un paso decisivo de su carrera profesional.
Ferrari ha amagado muchas veces con dejar la F1 por otra disciplina, Indianápolis por ejemplo, para obtener lo que desea o al menos evitar que las decisiones que se tomen les sean perjudiciales. Todo esto antes de que la FIA y Bernie Ecclestone les otorgaran el 'derecho a veto', que Liberty parece va a mantener cara al futuro.
Erik Jones se ha impuesto en la primera carrera de la temporada Nascar, la 'Bush Class'. Una carrera 'cruenta', casi por eliminación, un 'Gran Premio de Chapa y Pintura', o quizás debería llamarse ‘Bush Crash’, ya que sólo seis de los 18 participantes lograron llegar a la meta; los restantes acabaron 'besando' el muro o a otro participante. Incluso el ganador, Jones, cruzó la meta con serias 'heridas de guerra' en la carrocería. El morro de su coche estaba hundido y sujeto con cinta americana.
Uno de los constructores más curiosos que ha pasado por la F1 ha sido Lola. Pese a su gran prestigio en la construcción de vehículos de competición -sportscar primero, CAN-AM, Indycar, F2 y F3000- su presencia en la categoría reina ha sido prácticamente siempre por cuenta de terceros.
Guerlain Chicherit, un nombre potente entre la comunidad dakariana, ha desvelado su próximo y ambicioso proyecto: afrontar el Dakar al frente de un equipo de buggies eléctricos.
¿Gurney? A muchos aficionados jóvenes les sonará este nombre por un pequeño artilugio aerodinámico, un perfil que mejora notablemente el agarre aerodinámico y la eficiencia de un alerón. Fue introducido por Dan Gurney en sus coches de IndyCar en 1971 por vez primera, de ahí el nombre. Pero serán pocos quizás lo que sepan que Gurney es uno de los tres pilotos-constructores capaces de ganar un Gran Premio de Fórmula 1 al volante de un coche propio.
El FIA WTCR, el Mundial de Turismos, está en crisis. Las retiradas de Audi y Volkswagen —que parecen interesadas solo en competiciones eléctricas y el resto es tema de ‘clientes’— la no involucración oficial de Peugeot y Alfa Romeo y ciertas dudas sobre Cupra hacen que por el momento los coches inscritos estén por debajo de lo esperado.
El hecho de ver a Juha Hänninen hacer de copiloto de Jari-Matti Latvala me viene a la memoria el caso de Joan Arnella, en su momento uno de los grandes copilotos que teníamos, uno de los primeros profesionales del tema, copi de Pedro Bonet, gentleman-driver donde los haya, en muchas ocasiones, aunque comenzó con Joan María Xiol —al menos ahí le conocí— y también acompañó a otros pilotos.
El Rally de Suecia batirá su propio récord. En 2016 se convirtió en el rally más corto del mundial; se suspendieron 12 de las 31 especiales por falta de nieve, por lo que sólo se disputaron 226,5 kilómetros cronometrados. Este año será mucho peor: sólo tendrá 170 kilómetros cronometrados repartidos en las 11 especiales que han podido ser salvadas.
