Vasseur: "La Fórmula 1 no es el ombligo del mundo"

"No somos el centro del mundo. No somos algo imprescindible para la sociedad. Es cierto que contribuimos a desarrollar ciertas tecnologías, que somos una forma de entrenamiento para la gente, pero no somos el centro del mundo", apunta Vasseur para dejar muy claro que el retorno de la F1 a las pistas no será para el día después de declarar superada la pandemia.

Vasseur, que antes fue propietario de un equipo de éxito en categorías inferiores y que ha ido subiendo paso a paso en el escalafón, quiere poner los pies en el suelo y desmitificar un tanto la F1 como camino único, imprescindible, para salvar la F1.

"No quiero decir que no debamos empujar para volver cuanto antes, pero hoy el mundo tiene otras preocupaciones. Cuando te das cuenta de la gravedad de los daños causados por el coronavirus, de los problemas que nos ha creado, de la entrega del personal sanitario, del inmenso trabajo que se está haciendo… creo que debemos quedarnos en nuestro rinconcito y ser humildes. La humildad no hace daño y es necesaria de vez en cuando. Debemos asumir lo que sucede a nuestro alrededor".

El francés tiene claro que, tal como dijimos, no es tan importante cuándo se reiniciará la actividad sino el cómo. "Debemos mantener el equilibrio entre lo que hacemos y lo que sucede a nuestro alrededor. Correr mientras hay gente enferma, muy enferma, no parece de recibo. Hay que tener un mínimo de decencia. Hay que saber estar en tu sitio. Cuando llegue el momento en que se pueda volver a las tablas y ofrecer un espectáculo, estaremos".

El jefe de Alfa Romeo cree que Mónaco no será el único Gran Premio cancelado. La expectativa de ver más carreras canceladas es real, "pero sólo ahora estamos tomando conciencia de ello" y aunque no hay fecha para el regreso, es imposible predecirla, pero sobre todo hay que tener en cuenta que "habrá un antes y un después del coronavirus, al menos en cuanto a prioridades de la sociedad y no creo que la F1, y los deportes de motor sean una de esas prioridades". Un claro aviso a navegantes de cualquiera de las categorías del deporte del motor.

No busquen escandalizarse con estas palabras. No hablen de deslealtad a la F1, de pataleta de jefe de un equipo pequeño. Vasseur tiene muy claro que sólo si la F1 asume la realidad del papel que juega, del papel nuevo que se le asignará, será capaz de sobrevivir y reaccionar para retomar su protagonismo.