Tesla busca la financiación de sus proveedores mediante 'descuentos retroactivos'

Hasta la fecha, Tesla ha sido una 'máquina' de engullir dinero. Pérdidas millonarias de una parte –1.000 millones de dólares en el primer cuatrimestre de este año– y problemas de fabricación que han retrasado la comercialización del Tesla 3, modelo clave para el crecimiento de la compañía.

Los proveedores de la marca, al menos los más importantes, han recibido una carta proponiéndoles una rebaja en el precio de los suministros y piezas…. con efectos retroactivos.

Si renegociar precios a la baja es algo habitual en la industria, hacerlo con carácter retroactivo y, máxime solicitando el 'reembolso' de las cantidades abonadas desde 2016, es algo totalmente anómalo.

Tesla se encuentra en un momento clave. Las marcas generalistas comienzan a apostar por el eléctrico, pero la californiana es la referencia en el segmento además de tener aparentemente asegurado el suministro de baterías. No obstante, sus problemas industriales requieren de un refuerzo en toda la ingeniería e ingentes inversiones, lo que la deja en una difícil situación.

Además, algunas aptitudes mesiánicas de Elon Musk, el fundador y patrón, y sus intereses en otros proyectos espectaculares y costosísimos, desde el hyperloop a las naves o cohetes espaciales, no ayudan a la confianza de los inversores, lo que ha llevado a la compañía a solicitar el apoyo financiero de sus proveedores mediante una serie de 'descuentos' de carácter retroactivo desde el año 2016. Un movimiento inusitado que, de resultar efectivo, se convertirá en todo un hito en la industria del automóvil.

Si quieres leer más noticias como ésta visita nuestro Flipboard