Pirelli recupera el mítico Cinturato CN36

La popularidad del Abarth 124 Spider llegó a ser tal que Fiat lo ha recreado para hacer del nuevo Abarth 124 Rally no sólo un vehículo de culto, sino un arma deportiva interesante y a buen precio con el que Enrico Brazzoli se ha impuesto en cla Copa FIA de R-GT y Alberto Monarri en la categoría de dos ruedas motrices del CERA.

Si en aquellos triunfos de antaño jugó un papel clave el neumático Pirelli Cinturato CN36, que la firma italiana desarrolló para el coche, en la actualidad sucede lo mismo. Pirelli se ha inspirado en aquel CN36 para desarrollar un neumático moderno dentro de su gama Collezione, destinada a modelos clásicos y vintage. No son los neumáticos empleados por Brazzoli y Monarri en sus éxitos en los rallies, ya que usan tecnológica moderna y corresponden a la familia P Zero, sino pensados para ofrecer las sensaciones de antaño con las exigencias actuales.

El nuevo Pirelli Cinturato CN36 combina el look clásico con la tecnología moderna, y mantiene la sensación de ser suave a baja velocidad y tener precisión en la conducción. La carcasa se ha desarrollado para absorber mejor los obstáculos y controlar mejor el aquaplaning.

CINTURATO, RECUERDOS DE ANTAÑO

Me gusta el nombre de Cinturato, me trae grandes recuerdos. Eran los 70, cuando comencé a correr de copiloto. Entonces comenzaron a aparecer los primeros 'neumáticos de carreras'. La batalla fue dura: los Cinturato 'Punto Rojo' frente a los Firestone Wide Owal o los Michel XAS FF.

Los Firestone fueron los primeros que salieron en doble versión, seco y lluvia, que se diferenciaban porque la goma del segundo era más blanda, proporcionaban gran agarre, pero se 'fundía' muy rápido en seco. Eran la goma de emergencia cuando el resultado estaba muy apurado o algún problema te obligaba a recuperar: juego de agua nuevo ¡y a volar! Claro, tenía su precio. Los Michelin XAS eran también muy populares, pero los XAS FF eran los empleados por la Fórmula France o la Fórmula Renault francesa y tenían un agarre superior; ir a Perpiñán o a Andorra para hacerse con ellos era casi una necesidad.

Todas las marcas ofrecían interesantes premios en metálicos a los clientes mejor clasificados, incluso en ocasiones juegos de neumáticos gratis. Así que era normal dividirse entre las marcas, un 'pacto de no agresión' para poder sacar el máximo de premios. Es verdad, los que peleaban por la victoria o el título, buscaban lo más eficaz… y los demás, sacrificábamos un poco el tiempo en aras de la rentabilidad.

También estaban los General Sprintjet… 'el radial con coraje' y desde luego había que tener coraje, mucho coraje, para intentar ir deprisa con ellos. Eran muy duros, muy de serie, poco competitivos. Pero General ofrecía mejores precios que sus competidores, así que algunos pilotos apostaban por ellos para tomar la salida y entrar en el parque cerrado. A la que se podía se montaban gomas de las tres marcas anteriores para realizar los tramos.

¡Que tiempos aquellos!  Corrías con el mismo coche que usabas en tu vida cotidiana, al menos los que corríamos en el Grupo 1, los coches de serie; las medidas de seguridad eran mínimas, por no decir inexistentes. Había pequeños premios en metálico para cada categoría. Las marcas daban premios a sus mejores clientes. Las firmas de neumáticos y de lubricantes también; incluso Necto y Ferodo te ofrecían pastillas de frenos gratis. Así que no era extraño llegar a cubrir buena parte de los gastos de la carrera con los premios, que se pagaban al instante, y en ocasiones contabas con ello para volver a casa. Hoy lo dices y parece ciencia ficción.