Miami es especial para Magnussen: estaba aquí cuando Haas le propuso volver

Kevin Magnussen estaba en Miami de vacaciones cuando sonó su móvil. "Soy Guenther. ¿Quieres volver a pilotar para nosotros?". Kevin comienza aquí el que es su segundo retorno a la F1. Casi ningún piloto, al menos en la era moderna cuando se pilota toda la temporada y las parrillas están cerradas, puede decir lo mismo… salvo un retorno esporádico y temporal para cubrir una baja.

Steiner lo conoce bien. Podía haberse decantado por alguna de las jóvenes promesas, fijarse en el incombustible Nico Hülkenberg… Prefirió buscar en el fondo de armario. No había tiempo, era una incorporación sobre la marcha, mejor alguien con experiencia y que conociera al equipo. Sólo quedaban Kevin y Romain Grosjean, pero éste está centrado en su carrera de IndyCar, donde busca de forma afanosa su primera victoria.

Kevin debutó en McLaren en 2014; estuvo en el dique seco en 2016; volvió con Renault en 2016, para pasar a Haas en 2017 y siguió con el equipo estadounidense hasta 2020. El pasado año estuvo de nuevo fuera de la F1. En lugar de lamentarse y buscar el retorno, se enroló con Chip Ganassi para correr en IMSA con su Cadillac, llegó a disputar una carrera de IndyCar y tenía contrato para correr con Peugeot en el Mundial de Resistencia en cuanto la marca francesa estuviera a punto.

Unos días en los que quizás imaginaba estar en Le Mans este año, haciendo equipo comn su padre. De hecho, todavía figuran en la lista de inscritos con un LMP2, pero como reservas, con el estadounidense Marc Patterson como tercer piloto.

Tras las tres primeras carreras lleva 15 puntos. Sólo en 2014, su primera temporada, cuando debutó en Australia con McLaren y en espectacular segundo puesto, ha tenido un comienzo mejor.

El Magnussen de hoy es mucho mejor que el de 2020. Ha madurado. Es padre, pero sobre todo sabe que hay vida más allá de la F1 y que puede ofrecerle asimismo todas las satisfacciones posibles.

Quizás por ello, cuando apenas unos días de la llamada le preguntaron si estaba buscando un lugar en la F1, si quería volver, dijo sencillamente que no estaba interesado. Pero si la F1 te llama, es muy difícil decir no a este 'canto de sirena'.

"La F1 es algo fundamental, claro, pero no es la cosa más importante. Lo más importante es la familia, la vida fuera de la F1. Cuando estaba dentro años atrás no lo veía así, pensaba que la felicidad era algo que sólo la F1 podía darme, los resultados", señaló recientemente.

Cuando se sentó de nuevo al volante del Haas dijo sencillamente "no parecía que hubiera estado un año fuera de la F1, pero es evidente que en ese tiempo pasaron muchas cosas. Mentalmente había cerrado el capítulo de F1".

El coche funciona. Ha puntuado en tres de las cuatro carreras disputadas y todavía cree que se puede hacer más con el Haas VF-22. "Me divierto más ahora. Me tomo esta temporada como un bonus porque perder la F1 ya no me asusta. Conozco mis capacidades, tengo confianza, así que no hay nada de qué preocuparse".