Jaime Alguersuari Sr, homenajeado en el Circuit de Valencia

Jaime lo será como 'motard'. En su juventud, rivalizó con los Busquets, Herrero, Nieto, Tormo y demás grandes pilotos de la época, brilló en las 24 Horas de Montjuic y en el Bol d'Or. Recuerdo de esos tiempos, dará una vuelta al trazado a lomos de la mítica Ossa 250 monocasco que pilotó Santi Herrero y que hoy está en su poder.

Estará junto a algunos de ellos rodando en la Racing Legends, una prueba que quiere reunir a los que en su día fueron estrellas de las dos ruedas.

Siempre he sostenido que Jaime –'Loquillo' le llamaron por la pasión con la que defendía aquello en lo que creía- ha sido uno de los personajes más importantes en el mundo del motor nacional. Se definía a si mismo como 'monomaníaco con sentido de misión'.

Se marcó dos misiones. La primera, crear una escalera que llevara pilotos españoles al Mundial de Motociclismo y a ser campeones. Estaba convencido de que había mucho más que Ángel Nieto y mucho más que las pequeñas cilindradas.

Pasión pura por las dos ruedas, fundó Solo Moto, creó el Criterium para sacar jóvenes valores y después el Superprestigio para darles bautismo internacional. Los Sito Pons, Joan Garriga, Carlos Cardús, Alex Crivillé, Sete Gibernau, Carlos Checa o 'Aspar' surgieron de ahí.

La segundo, una vez cumplido el primer paso, llevar un piloto español a la Fórmula 1. De hecho, ha llevado a cuatro –Marc Gené, Fernando Alonso, Jaime Alguersuari Jr y Carlos Sainz–… y a varios otros foráneos –Monteiro, Kubica, Vettel, incluso Max ha pasado por la categoría que él creó–. Es cierto, todos ellos apuntaban alto, pero las World Series by Renault fueron el espaldarazo definitivo.

Quizás esto no hubiera pasado si el presidente de la RFME, Luis Soriano, no se hubiera mostrado intransigente en sus pretensiones, lo que llevó a decir: “Señor Soriano, le devuelvo a sus Junior”.

Por entonces, intuición empresarial, había fundado ya Solo Auto en la cual trabaja personalmente con José Luis Cortijos y la gran pluma española de la Fórmula 1 de entonces, Javier del Arco. Un día, estábamos Javier, José Luis y yo de 'chachara' junto a la fotocopiadora, esperando turno, cuando entró en tromba: “¡Llevaremos a un español a la F1! ¡Conseguiremos alguien tan bueno como Senna!”. Y al bueno de Javier casi le da un síncope.

Su idea era clara: conseguir un coche de altas prestaciones, pero a un coste inferior al de la F3000 o GP2. Nació así la F-Nissan y sus dos primeros campeones, Marc Gené y Fernando Alonso, saltaron a la Fórmula 1. Los circuitos españoles se llenaron, se pagaba entrada. La categoría era internacional, pero el calendario era prácticamente nacional y las parrillas tenían el 60 y 70% de pilotos de casa. Evolucionó hacia las World Series by Renault y la categoría se hizo cada vez más internacional, cada vez atrajo más extranjeros y el calendario se amplió a toda Europa. E incluso Red Bull llevó a la misma a algunos sus mayores promesas: Vettel, Vergne, Ricciardo, Alguersuari, Verstappen, Sainz, etc,

No faltará un coche de las World Series by Renault en el homenaje. Lo llevará Jaime Alguersuari Jr, que seguro recordará sentimientos y emociones aparcadas, que no olvidadas.