'Capolavoro' de Carlos Sainz en Turquía

Sobre una pista delicada, el madrileño dejó bien claras sus dotes de pilotaje, mantuvo un ritmo espectacular y de no ser por los cinco segundos perdidos en su parada en boxes, quizás le hubiéramos visto séptimo o incluso sexto.

Adelantó con pulso firme, seguro, sin contemplaciones. Algunos de sus adelantamientos fueron espectaculares, por fuera para completar la maniobra en el interior de la siguiente curva. También supo gestionar muy bien sus neumáticos, lo que no era fácil si tenemos en cuenta que fue uno de los primeros en parar a cambiar.

Por si fuera poco marcó vuelta rápida en tres ocasiones, pero el punto se le escapó porque Valtteri Bottas esperó al último momento para superar el tiempo de Carlos.

Sainz, además, se mantiene por delante de su compañero, Charles Leclerc, en el Campeonato aunque sea por medio punto. Leclerc posiblemente mereció podio en Turquía, pero en Ferrari prefirieron arriesgar, mantener las gomas intermedias en un intento, de altísimo riesgo, de ganar la carrera. No funcionó, debió parar y eso le costó la victoria.

Si me lo preguntan, les diría que fue el mejor de la carrera y el haber sido destacado como tal por los aficionados no hace otra cosa que confirmarlo.

Ha sido una buena carrera para Ferrari. Ha permitido arañarle diez puntos a McLaren. También domingo importante para Sainz, que mantiene así opciones de ser el mejor piloto de la segunda división A, aunque no será nada fácil remontar los 29 puntos que le lleva Lando Norris. Con todo, en una carrera que se anticipaba como delicada para él, logró que Lando sólo consiguiera dos puntos de ventaja, algo de lo que debe sentirse orgulloso.

Pero, además, gracias a Sainz hemos podido comprobar que la mejora del propulsor nuevo de Ferrari –bueno, la que proporciona la parte eléctrica nueva– es notable.