Baréin, el circuito de las cuatro rectas que hará sufrir a Alonso y Sainz

El veredicto de esta prueba debe ser mucho más significativo que el de Australia, un trazado donde las velocidades punta no eran muy elevadas, donde Fernando Alonso y Carlos Sainz, al igual que los motores Renault, pudieron defenderse muy bien. Pero aquí se superan los 310 kilómetros por hora en cuatro puntos, cuatro finales de recta.

Esto lo convierte, asimismo, en un trazado donde adelantar es fácil y la falta de potencia es un lastre insufrible. Y los datos de Australia fueron claros: los coches motorizados por Renault ocupaban siempre la posición de cola en lo que a velocidades punta se refiere.

No es ese un buen augurio para Fernando Alonso y Carlos Sainz. Ni siquiera la presencia de una nueva ala en McLaren puede compensar el lastre de al menos 30 caballos de potencia menos que los motores Mercedes o Ferrari, hasta 50 con Mercedes cuando Hamilton activa el 'Party Mode', del que todos sospechan su existencia pero que en Mercedes señalan que es sólo un 'acudit' –una invención jocosa– del piloto británico.

Muchos se preparan para ver en Baréin una carrera más interesante que la que hemos vivido en Australia. Como dato, es un circuito donde adelantar no parece complicado, precisamente por la existencia de esas cuatro rectas. El pasado año se vieron aquí casi tres veces más adelantamientos que en la media de todos los GP, 54 sobre una media de 20.

Uno de los 'trucos' para este resultado es que las cuatro rectas vienen precedidas de curvas lentas, muy lentas. Virajes en los que hay 'efecto burbuja' y se puede iniciar la recta casi a rebufo.

Quizás por ello la FIA por el momento sólo ha anunciado dos zonas de DRS, como el pasado año. Pero siempre se reserva la potestad de ampliarlas a tes si hiciera falta, sin constatasen una previsible cierta falta de adelantamientos. Solución de emergencia a falta del imprescindible cambio de reglamento técnico.

Por eso tememos que Alonso y Sainz sufran y que los Red Bull no puedan estar aquí en cronos de cabeza. Prima la velocidad punta, es decir su punto flaco, sobre el paso por curva. Es fácil adelantar y resultará mucho más complicado contener al perseguidor de lo que lo fue en Australia.

Es cierto, el DRS y el rebufo cambia muchas cosas, todo. Basta mirar las velocidades puntas en carrera. Nico Hülkenberg consiguió 319,7 kilómetros por hora, la más alta, en Australia... Sainz se quedó en 290,9 kilómetros por hora, prácticamente el más lento, sólo por delante de Harley. ¡Casi 30 kilómetros por hora sobre tu compañero!, lo que es una barbaridad... sobre todo teniendo en cuenta que Hulkenberg –309,9 kilómetros por hora– y Sainz –310,4 kilómetros por hora– fueron parejos en calificación, donde ambos usaron DRS... pero donde no se aprovechan rebufos. En carrera Sainz tuvo algún problema de potencia, además de físico, pero sobre todo no pudo aprovechar ningún rebufo.

En cualquier caso, coches que estaban claramente por detrás del McLaren y del Renault en Australia, aquí pueden ser un serio enemigo: Williams o Force India, por ejemplo. Y, por supuesto, están los Haas que deben ir por delante; incluso, si nos atenemos a lo visto en Australia, por delante de Red Bull.

Si quieres leer más noticias como ésta visita nuestro Flipboard