Alex Palou: el Campeonato se pone más difícil tras Indianápolis

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03 Ago 2022 - 13:42

Quedan cuatro carreras para terminar la temporada y ahora mismo tan sólo pienso en los 52 puntos que me separan del campeonato. Se nos han complicado las cosas, porque la segunda carrera de Iowa fue particularmente difícil y contábamos con recortar distancias en Indianápolis, pero no lo conseguimos. No es el escenario ideal, pero todavía tenemos una oportunidad y mi intención es pelear por el título hasta el último día.

Las semanas y las carreras pasan a toda velocidad, a estas alturas del calendario. En el último mes hemos hecho cinco pruebas distintas y este fin de semana nos toca Nashville, donde seguirá la fiesta. A priori es un buen lugar para nosotros, por lo que el objetivo no es otro que conseguir un gran resultado que nos permita acercarnos a nuestros rivales y meterles más presión en la pelea por el título.

Nashville me hace especial ilusión porque estará toda mi familia conmigo. La semana pasada llegaron a Estados Unidos mis padres con mis abuelos, mis tíos y unos amigos, y la idea es que este fin de semana estén todos en el circuito para ver la carrera. Será como cuando corría en Montmeló o en el karting, que se acercaban todos al circuito para apoyarme. Han hecho un gran esfuerzo para venir desde casa y esto no pasa todos los días, así que trataré de disfrutarlo.

Desde la última vez que nos pusimos al día, hemos corrido dos veces en Iowa y una en el circuito rutero de Indianápolis.

La primera carrera de Iowa fue una sorpresa. Yo me esperaba lo peor, porque habíamos hecho un test realmente malo en el que nos faltaba mucha velocidad. Pero resultó que en verdad teníamos ritmo y pudimos pelear y terminar sextos, cumpliendo de sobras el objetivo de terminar en el Top 10. Eso resultó muy alentador.

Pero las cosas cambiaron al día siguiente. En la segunda carrera no tuvimos ritmo en ningún momento y nos fuimos progresivamente para atrás hasta acabar decimoterceros. Nos peleamos con los reglajes en cada vuelta y no hubo ningún stint en el que todo nos fuera bien de principio a fin. Obviamente no era lo que queríamos, pero al menos entraba dentro de lo que podíamos prever para Iowa.

Y después nos fuimos a Indianápolis, que fue la sorpresa más agria de todas porque no cumplió nuestras expectativas. Indy es un circuito que tradicionalmente se nos ha dado bien, pero esta vez no fue así. Hicimos una quinta posición en los entrenamientos libres y nos clasificamos séptimos, y a partir de ahí todo se torció porque el ritmo de carrera nos abandonó.

Creo que nunca habíamos estado tan perdidos en un circuito rutero, porque simplemente no teníamos ritmo. Cada vez íbamos más lentos. Tuvimos mucha degradación con el primer juego de neumáticos blandos y la cosa no hizo más que empeorar. Décimos al final, que creo que está bastante bien por cómo pintaron las cosas en algún momento.

Fue toda una sorpresa. Algunas veces puede ocurrir alguna cosa en la carrera que eche por tierra el resultado que estabas buscando, pero ésta fue la primera carrera rutera en la que nos faltó ritmo de carrera. Es una auténtica pena, porque contábamos con sumar muchos puntos y acercarnos al campeonato, y en lugar de hacer eso nos hemos alejado.

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Algo especialmente extraño de Indianápolis fue la degradación de los neumáticos. Normalmente éste es un aspecto que podemos controlar fácilmente, siempre podemos alargar un par de vueltas más que nuestros rivales para buscar el overcut, pero esta vez no fue así. Con los rojos pude adelantar, pero de golpe perdí las gomas y me dejé diez segundos en tres o cuatro vueltas. Eso mató por completo mi carrera, porque me costó cuatro o cinco posiciones.

Eso nos hizo dudar sobre cuál era la mejor estrategia para el resto de la carrera. Habíamos previsto volver a poner el neumático rojo, pero teníamos miedo de volver a toparnos con esa degradación. Acabamos decantándonos por el compuesto más duro, pero resultó aún peor porque entonces íbamos aún más lentos. Estábamos en una espiral descendente, cada vez a peor. Una pena.

Dándole vueltas a la situación, no sé si quizá lo que pasó es que, como no teníamos el ritmo de otros días, forcé más de la cuenta para seguir a Josef Newgarden en las primeras vueltas y eso hizo que luego el neumático blando se degradara más de la cuenta.

Mis compañeros también tuvieron problemas, por lo que no es que mi coche fuera un caso aislado. Aun así, no fue exactamente la misma situación para todos. Ellos sufrieron desde el principio del fin de semana y yo fui bien hasta la carrera, que es cuando se torció todo.

El campeonato se nos está poniendo difícil y no lo puedo negar. Teníamos que salvar los muebles en Iowa y sumar más puntos que nuestros rivales en Indianápolis, y no lo hemos hecho. Pero ahora seguramente estamos echando de menos los puntos que dejamos escapar a principios de año con el trompo del GP de Indianápolis, el accidente de Road America o la avería de la clasificación de Toronto, entre otros. Quizá hemos tenido demasiados problemas y errores.

La situación actual con el equipo no es la ideal, pero no creo que esté afectando al rendimiento que tengo en la pista. Es más bien una cuestión de que perdimos muchos puntos en la segunda carrera de Iowa y sobre todo en la última de Indianápolis, que rompió todas nuestras expectativas. Ahora estamos a 52 puntos del líder del campeonato. Aun así, todavía tenemos una oportunidad y estamos aquí para pelear hasta el final. Y sobre todo lo demás, os pido un poco de paciencia y comprensión porque ahora mismo no puedo hablar.

Este miércoles tengo simulador y luego ya pongo rumbo a Nashville. A priori tendría que ser un buen fin de semana, basta con ver que el año pasado fui tercero en la clasificación –aunque luego me sancionaron por cambiar de motor y eso complicó el resto de la carrera–. Si el año pasado fuimos tan rápidos no hay motivo para pensar que no podemos volver a hacerlo, de modo que el objetivo es hacer algo grande.

Y lo dicho: este fin de semana habrá un ejército Palou en las gradas. Es la primera vez que mis abuelos y mis tíos están en Estados Unidos, y es bonito que puedan vivir esto conmigo. Me sabe un poco mal estar liado y no poder hacerles de guía estos días, pero Nashville es una ciudad con mucha vida y seguro que la disfrutan. Seguro que será divertido y espero que el domingo por la tarde podamos celebrar algo juntos.

 

LA COLUMNA DE ALEX PALOU: TEMPORADA 2022 

1. Previo de la temporada
2.  Segundo en St Petersburg que sabe a victoria
3. Los retos de Texas
4. Una partida de ajedrez en Long Beach
5. Segundo en Barber con un overcut
6. Previo Indy500 y un GP de Indianápolis caótico
7. Un Pit-Lane cerrado en las 500 Millas de Indianápolis
8. El accidente con Ericsson en Road America
9. Salvamos los muebles en Toronto
10. Iowa y la sorpresa desagradable de Indianápolis
11. Debut en F1 en los Libres 1 del GP de Estados Unidos

 

Alex Palou
IndyCar
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