Ricciardo: "Haré lo que pueda, pero no espero ser campeón en 2017"

Pilotos, equipos y personalidades que trabajan en el paddock ya están en Melbourne, preparados para el comienzo de una nueva temporada del Campeonato del Mundo de Fórmula 1. La gran incógnita será confirmar si realmente Ferrari, o incluso Red Bull, le han recortado a Mercedes la distancia suficiente como para disputarles la carrera el título. Ante este panorama, Daniel Ricciardo es optimista respecto a las posibilidades que pueden tener tanto él como su equipo.

"Con suerte vamos a ir bien, pero es difícil de saber. Los test nunca son una imagen clara de la realidad, pero espero que Ferrari y Mercedes sean rápidos. El año pasado no gané el título, pero aun así estoy contento. Logré mi primera pole position y volví al primer escalón del podio", ha recordado en las declaraciones recogidas por el periódico Independent. Para el piloto australiano, la satisfacción no debe ir ligada directamente a los resultados, sino a la creencia de haber dado todo lo que tenía en la pista.

"Si rindo a mi mejor nivel estaré contento este año, y lo estaré con el campeonato del mundo. Es mi objetivo y apunto a ser campeón del mundo. Haré lo que pueda para que suceda este año, pero no lo espero", ha advertido Ricciardo, consciente de la dificultad que entraña batir a Mercedes, Ferrari y su propio compañero de equipo.

RELACIÓN CON VERSTAPPEN

Precisamente, la relación pública que mantiene con Max Verstappen es cordial e incluso positiva, a pesar de la estrecha rivalidad que los une y que se prevé que vaya en aumento si tienen la oportunidad de luchar por victorias.

"Obviamente tratamos e intentamos mantenerla –la relación– tan amistosa y profesional como podemos. Ambos queremos ganar y batirnos el uno al otro, y no se está negando eso. Al mismo tiempo, hemos tenido un equipo que está intentando tener coches rápidos y confían en nosotros, no solo para empujar el coche, sino para compartir y desarrollar la tecnología del coche también", ha declarado el australiano, que ya en 2014 supo manejar con normalidad la relación con Sebastian Vettel.

Así pues, Daniel Ricciardo, que abre la temporada corriendo en casa, sostiene un discurso integrador para evitar posibles fricciones con Max Verstappen. Por este motivo, recuerda de la importancia de que los compañeros de equipo trabajen unidos, lo que beneficia al conjunto del equipo y por lo tanto, indirectamente, también a los intereses individuales. "Dos suman más que uno y entendemos que solo nos estamos ayudando a nosotros mismos si nos ayudamos el uno al otro, porque después el coche va a ser más rápido y nos va a dar una mejor oportunidad para ganar", ha concluido el piloto de 27 años, que disputará su séptima temporada en la máxima categoría del automovilismo mundial.