La Comisíón de F1 se reunirá el 18 de diciembre para tratar la crisis

La escudería anglorusa se perdió las tres últimas citas del calendario, despidió a todos sus trabajadores después de entrar en concurso de acreedores y subastará todo su material. Los malayos entraron en el mismo camino, pero al menos consiguieron reunir fondos para estar en Abu Dabi gracias a una estrategia de crowfunding y están intentando encontrar un comprador que les libre de la desaparición, algo que parece improbable.

Así, después de ver los derroteros que siguieron sus compañeros de la parte más retrasada de la parrilla, el resto de escuderías modestas (Force India, Lotus y Sauber) apretaron a la FIA, a Ecclestone y a los demás equipos para encontrar una solución que les impidiera acabar como ellos. Se esperaba una reducción en los costes, después de que el desarrollo de los V6 Turbo haya resultado tan caro, o un incremento de los ingresos, pero todavía nada se ha decidido.

Incluso, en la última reunión de la Comisión de F1 que se celebró la semana pasada se pasó por alto el tema de los costes para el próximo año, lo que ha inquietado mucho más a los posibles perjudicados. Se dio más importancia a otros aspectos, como la supresión de los dobles puntos, las resalidas tras el coche de seguridad y la descongelación de las unidades de potencia, y no dio tiempo a tratar el punto más trascendental de todos.

Por eso, el máximo organismo internacional y Bernie han decidido llamar de nuevo a filas a los equipos, para tratar de solventar de una vez por todas la crisis que asola el campeonato. Será el más crucial, pero no el único debate en la reunión, ya que también se aprovechará para tratar otros temas pendientes, como la búsqueda de estrategias para mejorar la popularidad del deporte tras los descensos de audiencia.