Montoya, el aspirante 'tapado' a la triple corona

El 'tapado' en esta carrera por la gloria es Juan Pablo Montoya. El mismo ya cuenta con la victoria en el GP de Mónaco y hoy por hoy es el que está más cerca de conseguirla, de convertirse en el segundo piloto que logra este hito. El colombiano ganó en el Principado en 2003 y además, lo ha hecho ya en las 500 Millas, de forma que sólo le resta Le Mans.

Apeado por su equipo, Penske, de la Indycar y llevado a la IMSA, a Montoya se le abrieron los ojos de la triple corona y va a intentarlo ya este año. Penske no participa en la carrera, pero Montoya ha encontrado un volante en el equipo United Motorsport… ¡de Zak Brown!, el jefe de McLaren, el hombre que ha dado el empujoncito definitivo a Fernando Alonso para que ataque la triple corona.

Es cierto, Montoya no pilota un LMP1, sino un LMP2 y estos coches son claramente menos competitivos…. pero Le Mans es una carrera muy dura, imprevisible. El año pasado, en plena batalla Porsche-Toyota, dos LMP2 subieron al podio y uno de los cochesd de United fue quinto absoluto. La fiabilidad de los LMP1 privados está por ver y Toyota parece que siempre ha tenido la suerte de espaldas en el trazado francés, así que el morbo existe.

"Ya intenté correr antes. En 2015 probé el Porsche 919 Hybrid y quería correr con ellos en 2016, pero finalmente Porsche decidió alinear sólo dos coches, en lugar de tres", ha explicado Montoya.

Juan Pablo reconoce que por entonces no se le había pasado para la cabeza lo de la triple corona, quizás "porque nunca he corrido detrás de los récords. Me mueve más el probar otras disciplinas, correr otras carreras".

Experiencia en resistencia no le falta. Ha ganado por tres veces las 24 Horas de Daytona –en las que los pilotos de Stock Cars o Indy son habituales–, la primera de ellas en su debut en la prueba.

Es cierto, lo tiene difícil… pero cosas más extrañas se han visto en las carreras. Hay personas que recuerdan la victoria en 1979 del Porsche 935 K3 de los hermanos Kremer en manos de de los hermanos Don y Bill Whittington y Klaus Ludwig. Los favoritos eran los Mirage-Gulf, pero tuvieron problemas, o el Porsche 936 de Jacky Ickx, excluido por recibir ayuda externa o aún los Rondeau, pero los Porsche acabaron copando las cuatro primeras plazas… ¡con Paul Newman en el segundo escalón del podio!.

El Porsche 935 tenía un depósito pequeño, era un coche del campeonato alemán de Gr. 5 y debió parar unas 12 veces más que los del Grupo 6, lo que representaba perder casi 20 minutos sólo por los repostajes.

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