Porsche 911 Carrera 4 y 911 Targa 4 2016: ¡Biturbos y de tracción total!

A nivel visual, al margen de la adaptación a la nueva generación, poco más hay que destacar en relación al 911, ya que son calcados. El Porsche 911 Carrera 4 presenta la nueva parrilla del capó trasero y las nuevas ópticas delanteras. Sin embargo, el gran punto diferenciador con su hermano son las luces traseras unidas por una franja de luz recorriendo todo el capó. Por su parte, en el 911 Targa 4 los cambios estéticos pasan por una bóveda acristalada de nuevo diseño.

Como es lógico y como ya pasó con la presentación del 911, el foco de atención se esconde bajo el capó de ambos modelos. Tanto el Carrera 4 como el Targa 4 montan motores de 3.0 litros con una disposición de seis cilindros en línea y dos turbos. La potencia es de 370 caballos y su par motor de 450 Nm. Ambos datos aumentan considerablemente respecto a la anterior generación. Por su parte, las versiones 'S' también mejoran sus prestaciones alcanzando una potencia de 420 caballos y 500 Nm de par.

La inclusión de estas mecánicas turbo para las versiones 4 y 4S de ambos modelos representan un salto evolutivo, por concepto y también por prestaciones. El Porsche 911 Carrera 4 acredita una aceleración de 0 a 100 kilómetros por hora por debajo de los 4 segundos, por primera vez en su historia. Eso sí, para la versión con cambio PDK y paquete Sport Chrono. El consumo homologado es de 8 litros por cada 100 kilómetros, tanto para el Porsche 911 Carrera 4 como para el 911 Targa 4.

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Al margen de los propios propulsores, hay destacados cambios mecánicos. La tracción total se gestiona a través de un sistema electrohidráulico de nueva factura, mejorando la eficiencia de un sistema que ha sido revisado para aumentar la rapidez y la sensibilidad. También se han hecho mejoras en la suspensión adaptativa PASM y se han equipado nuevos amortiguadores. Además, por primera vez se incluye en las versiones de acceso el eje trasero direccional, con el que mejora la conducción.

Su habitáculo trasmite una mejora notable. Comparte diseño con el nuevo 911 y 911 Cabriolet e incorpora tecnología de primer nivel, con mayor conectividad gracias a la evolución de su sistema multimedia. Uno de los principales atractivos es el volante heredado del Porsche 918 Spyder. Desde este elemento se controlarán los modos de conducción ('Normal', 'Sport', 'Sport Plus' e 'Individual'). Las versiones con el cambio PDK además incorporarán una posición adicional en el selector llamada 'botón de respuesta Sport', un sistema que prepara el tren motriz para entregar la máxima aceleración posible.