Lamborghini Centenario: 770 caballos en acción

El Lamborghini es especial por muchos motivos. Podríamos señalar a su corta y prácticamente ya vendida tirada que se limitará en principio a 20 unidades de la carrocería coupé y 20 de la carrocería roadster. Quizá en este punto la firma podía haber buscado el número 100 para este majestuoso deportivo, pero la exclusividad prima por encima de otros factores. Sin embargo, el gran motivo de su majestuosidad es que el Lamborghini Centenario llega con un marcado y atractivo lenguaje de diseño nuevo.

El Lamborghini Centenario tiene unas líneas más marcadas, es más visceral y pasional en todos los sentidos. En su frontal nos encontramos unas tomas de aires prominentes, un capó de gran tamaño y líneas muy visibles. Sin sorpresas en las ópticas, moverse por los 4,92 metros de largo de este modelo representa ver una pulida aerodinámica construida de manera íntegra en fibra de carbono, lo que le permite acreditar 1.520 kilogramos en la báscula. El uso de este material además dota al Centenario de una imagen más radical.

En cualquier caso, el Centenario deja constancia de su nuevo diseño en unos pasos de rueda que juegan con las formas de sus taloneras laterales y de las tomas de aire a la par que muestran unas llantas de 20 o 21 pulgadas en unos neumáticos Pirelli P Zero. En su zaga encontramos un difusor de anchas medidas que se incrusta en la propia carrocería mejorando la carga aerodinámica de manera notable. Dividido como en distintos compartimentos, esconde en su interior unas salidas de escape en posición central. Las luces LED presentan un diseño lineal con dos pequeños apéndices en sus extremos.

En las entrañas del Lamborghini Centenario nos encontramos un motor V12 con 770 caballos de potencia. Este propulsor está asociado a una caja de cambios ISR que trasmite toda esta potencia de forma permanente a las cuatro ruedas. Gracias a este sistema este Lamborghini puede acelerar de 0 a 100 en tan sólo 2,8 segundos y consigue un magnífico paso de 0 a 300 kilómetros por hora en 23,5 segundos. Unas cifras que son duda le convierten en el Lamborghini más potente y rápido jamás producido.

Pero no sólo de un potente propulsor vive el hombre y el Lamborghini Centenario es una muestra de las mejores tecnologías de la marca. En primer lugar, porque este superdeportivo tiene tres modos de conducción denominados 'Strada', 'Sport' y 'Corsa', que permiten modificar el comportamiento dinámico del vehículo con retoques en la entrega de potencia, las suspensiones y otros elementos del coche. Además, el Centenario a bajas velocidades tiene giro de ruedas traseras opuesto para ofrecer un mayor ángulo de giro.

La misma pasión trasmitida en su exterior se dibuja en el habitáculo del Lamborghini Centenario, aunque en este caso el lujo y la exclusividad dan un paso al frente. Bien es cierto que la fibra de carbono es protagonista como en la carrocería en las distintas inserciones que vemos en el salpicadero, en los paneles de la puerta o en la construcción de los propios asientos deportivos, pero esta se combina con tapizados en Alcantára y otros materiales nobles.

A nivel tecnológico encontramos una pantalla táctil HD de 10,1 pulgadas con navegador por satélite. Plataforma perfecta para el sistema de infoentretenimiento de Lamborghini, que además de ofrecer soporte para Apple CarPlay, acredita aplicaciones para gestionar las redes sociales, el correo electrónico y otros elementos cotidianos de nuestra vida 2.0. En la parte meramente informativa, esta misma pantalla nos muestra la telemetría del Centenario con datos que van desde las fuerzas G, los consumos o incluso la comparativa con otros conductores.