Binotto no quiso esperar y dio el portazo
Desde que saltó a la luz la inminente salida de Mattia Binotto de Ferrari han pasado largas semanas sin que ni una parte ni otra hayan dicho nada, al menos nada consistente. Uno tiene la impresión —ahora— de dos cosas. La primera, que la suerte de Mattia Binotto estaba echada —en su contra, obviamente— desde hace algún tiempo. La segunda que, al presentar su renuncia, Mattia ha pillado a sus jefes —Benedetto Vigna y John Elkann— a contrapié… porque no tenían preparado el recambio todavía.