La no clasificación le costará a Hinchcliffe el título de IndyCar y a Gade el puesto

Hinchcliffe no logró el promedio necesario para clasificarse entre los 33 aspirantes. En el último momento fue eliminado en el 'bump', el asalto final de los no clasificación, y Oriol Servià es uno de los 'culpables'.

La eliminación puede costarle buena parte de sus aspiraciones al título, es casi un doble cero, ya que en las 500 Millas otorgan puntos dobles.

Una eliminación que SMP, el patrocinador del equipo Schmidt Patterson, intentó evitar aprovechando las reglas de Indianápolis. En las 500 Millas no se clasificación pilotos, sino coches.

Es decir, un coche puede cambiar de piloto hasta el último momento. El algo que se ha hecho muchas veces. En algunos por necesidad, porque el día de la clasificación, el piloto estaba indisponible y se llamaba a un ilustre y experimentando veterano para que colocara el coche en la parrilla.

James es quinto del campeonato antes de las 500 Millas y SMP intentó por todos los medios 'comprar' un volante. Algo que hizo McLaren el pasado año –aunque antes de los primeros entrenamientos– comprando la plaza de Stefan Wilson –el hermano del malogrado Justin Wilson– para darle un coche a Fernando Alonso. Se pensó en Jack Harvey, cuyo coche también gestionaba Schmidt Patterson, pero ni éste ni sus patrocinadores quisieron oír hablar de tema.

No puede decirse que el piloto sea un neófito en Indy. En 2015 sufrió un grave accidente en los ensayos y una pieza de la suspensión le atravesó la pierna. La rápida actuación de las asistencias le salvó la vida. En 2016, su retorno a Indy, se saldó con la Pole.

Esta no clasificación le ha costado el puesto al ingeniero de Hinchcliffe, la conocida Leena Gade, que cuando estaba en Audi se encargó de los coches ganadores en tres ediciones de las 24 Horas de Le Mans.

La llegada de Leena la notó el equipo en los cuatro circuitos ruteros disputados hasta el momento –San Petersburgo, Long Beach, Alabama e Indianápolis), pero en el único oval disputado hasta la fecha, Phoenix, quedaron en evidencia algunos problemas, aunque se maquillara el tema con un sexto puesto final.

Al igual que los circuitos ovales requieren una conducción especial, muy precisa, también ello se nota en la puesta a punto, superespecífica, para este tipo de trazados. Trucos que no se aprenden de la noche a la mañana y en los que parece Leena ha tenido algunas dificultades de adaptación.

Un portavoz del exequipo ha explicado que "tras sentarnos a hablar y ver que la relación no era productiva para ninguna de las dos partes, acordamos separarnos".

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