Toro Rosso STR10: Un vistazo técnico

Pero no es por falta de decisiones arriesgadas. Los Toro Rosso suelen ser coches bastante

Comenzando por delante, vemos un morro como el de Ferrari. Plano, acabado en una ligera punta... Quizá recuerda ligeramente al pico de un pato. Las cámaras están colocadas sobre cuernos, como ya es habitual. Los equipos han optado por atrasarlas ligeramente para poder usar este elemento.

Unas suspensiones que no se salen de lo habitual nos dirigen a unos pontones extremadamente pequeños. Sí, no llegan al extremo de McLaren por ejemplo, pero es digno de mención. Aunque hay que destacar que las entradas de aire con casi testimoniales en comparación con otros equipos.

Estos pontones son, en concepto, parecidos a los de McLaren, pero en la zona final vemos como claramente han optado por la opción Mercedes de dirigir aire por encima y por debajo del pontón.

En la zona trasera nos encontramos una salida de aire semejante a la de Lotus, así como un pilar de soporte del alerón que va al capó motor. Vemos también uno de los monkey seat más curiosos de la parrilla, con formas orgánicas que se adaptan al escape y carentes de endplates.

Con todo, llegamos a la parte más curiosa del coche, la toma de admisión. Es enorme, descomunal, desproporcionada. Obviamente aquí incluimos el flujo de aire que necesita el motor para la combustión, así como tomas suplementarias para refrigeración.

En vista de esto, podemos pensar que el Honda no es el único motor con un radiador colocado en esa zona. Desde luego, son los dos equipos con las tomas más grandes. El STR10 incluye, por si no fuera suficiente, otras dos tomas algo más atrás.

Podemos observarlas con detalle editando esta foto genial que nos brinda Martí. ¡Menuda alegría me dio cuando me dijo que era una de las cosas que más había fotografiado! En ella parece apreciarse cómo es la toma de abajo la que tiene funciones de refrigeración, albergando un radiador.

En definitiva, tenemos un coche arriesgado en refrigeración. Parece que optan por derivar algo de trabajo de los pontones hacia la zona de la toma de admisión, y es que ya se sabe hasta los extremos que se llegan en este deporte por arrancar una décima al cronómetro a base de “adelgazar” el coche.